Sinopsis de El cielo azul:

Tras la publicación, en La sonrisa vertical, de tres títulos de Georges Bataille, llega ahora el turno de otro clásico de la literatura erótica. Bataille escribió El azul del cielo en 1935, pero, como confiesa en el prefacio, lo ignoró durante mucho tiempo. La guerra de España y las catástrofes que la humanidad tuvo que soportar durante treinta años, creía, vaciaron la obra de contenido. Sólo en 1957, gracias al consejo de algunos amigos, el gran escritor francés decidió hacerlo público a través de J.J. Pauvert, su editor en Francia.

Pese a la luminosidad del título, esta obra se inspira en la transgresión de una moral prudente, en una búsqueda peligrosa: el aprendizaje de la muerte, la profundidad “imposible” de ese cielo azul que nos atrae y repele al mismo tiempo. Londres, París, Barcelona pintan una topografía de la perdición, un cuadro en el que Troppman, a través de borracheras, noches vacías y extrañas celebraciones, se acerca a esa nueva forma de pureza, la comunión con la muerte gracias al descubrimiento iluminador de lo sórdido.

Se puede decir que todo Bataille está presente en El azul del cielo, todos los temas que le preocuparon a lo largo de su vida: ideologías, muerte, estados de éxtasis, sexo... Han pasado trece años desde que empezamos a publicar Georges Bataille. Hasta la fecha son seis las obras que, en diferentes colecciones, han visto la luz: La verdadera Barba Azul (Infimos 35), Erotismo (Marginales 61), Historia del ojo, Mi madre, Madame Edwarda seguida de El muerto (La vertical). Sonrisa 10, 19 y 25) y Las Lágrimas de Eros (Los 5 Sentidos 12).

SOBRE EL AUTOR DE AZUL DO CÉU

Georges Bataille nació en Billon, Francia, en 1897 y murió en Malmaison en 1962. Hombre al que le gustaba trabajar en las sombras, se convirtió, sin embargo, en uno de los pensadores europeos más innovadores e importantes del período de entreguerras. Fundó varias revistas, entre ellas dos que hicieron historia: Documentos y Crítica. Escribió ensayos como La littérature et le mal, Erotismo (Marginales 61), L'expérience intérieure y La part maudite y, en el campo de la narración erótica, textos extraordinarios como Historia del ojo, Mi madre seguida de El hombre muerto. , Madame Edwarda y El Azul del Cielo (La Sonrisa Vertical 10, 19, 25 y 44). Para él, toda creación es un proceso mediante el cual el hombre se supera a sí mismo transgrediendo todos los tabúes, especialmente los relacionados con el erotismo y la muerte.